La innovación nos permite alcanzar los objetivos estratégicos, mejorar la competitividad, diferenciarnos y crear valor. Sabemos que la innovación es una habilidad y que puede desarrollarse, podemos aprenderla e incluso llegar a dominarla.
En la actualidad, los trabajadores son considerados un elemento clave de la organización. Por esta razón, es importante formarlos, invertir en ellos puede significar un incremento de la productividad, de la motivación, de los beneficios de la empresa y de la satisfacción de los clientes.
En este contexto, es crucial elegir la formación adecuada y de utilidad para los empleados. La formación que reciban debe ser superior a la inmediatamente necesaria para las tareas que desarrollan en la actualidad. Se debe ir más allá, pensando en las habilidades que en un futuro necesitará desarrollar diferentes de las que se le requieren actualmente. Por este motivo, y debido al rechazo de algunos trabajadores a realizar cursos de formación que consideran poco útiles, es imprescindible disponer de unos canales de comunicación con los empleados para transmitirles los beneficios de la información que se impartirá.
Además, si realmente quiere sacar provecho de los cursos impartidos, la empresa debe evitar la monotonía de impartir “X” número de cursos de formación por año siguiendo las normas. La obligación de realizar un número determinado de cursos puede conducir a la realización de los mismos solo por temas burocráticos, perdiendo así la visión de los objetivos que se pretenden conseguir con las sesiones de formación. No hay peor estrategia que la de obligar a los empleados a asistir a cursos que no tienen ninguna utilidad real ni para ellos ni para la empresa.
Paralelamente, cabe destacar en un entorno de incertidumbre y constantes cambios como es el que vivimos hoy en día, la importancia de la innovación como proceso de transformación de los negocios. El 97% de los consejeros delegados entrevistados en la Global CEO Pulse Survey on Innovation elaborada por PwC afirman que la innovación se ha convertido en una prioridad para las empresas en todo el mundo.
Esta innovación a la que se refieren ya no está intrínsecamente vinculada a los departamentos de I+D de las distintas áreas de negocio de la compañía, sino que envuelve a la totalidad de la empresa, clientes y diferentes aliados externos de la organización.
Así pues, considerando tanto la importancia de la formación de los empleados como la creciente necesidad de innovar y ser creativos, las organizaciones deberían hacerse preguntas del tipo:
- ¿Conseguimos involucrar a los trabajadores en la apuesta por la innovación?
- ¿Incluimos elementos como la creatividad o la promoción y ejecución de nuevas ideas como una parte esencial del trabajo de los empleados?
- …
En Innovation FactoryTM Institute entendemos la importancia de ambos aspectos y los hemos relacionado creando cursos de innovación y creatividad adecuados a las necesidades actuales de las empresas, dotándolos de las herramientas que luego los profesionales podrán utilizar en sus puestos de trabajo y desde cualquier área de la organización para ser más creativos e innovadores. ¡Te invitamos a darle un vistazo a nuestro listado de cursos sobre innovación!