A medida que transcurren los años, nuevas soluciones (quizás más rápidas, más innovadoras o simplemente más sencillas de cara al público) surgen de la nada para dar respuesta a mismos problemas. Soluciones que ponen un punto y final a aquellas que un día fueron primicia para un problema ya resuelto. Como las nuevas y jóvenes generaciones sustituyen a las antiguas cuando estas se retiran para ceder su lugar, las nuevas soluciones jubilan a las antiguas aportando un valor añadido.
Pero si crear nuevas soluciones fuese tan fácil, constantemente tendríamos nuevas propuestas cada una más innovadora que la anterior. Así que, la pregunta clave sería ¿cómo llegamos a esta nueva “milagrosa” idea que dará solución a un problema ya resuelto? La respuesta a todos estos dolores de cabeza es la resolución creativa de problemas consiguiendo así, nuevas soluciones para un mismo problema.
¿Pero cómo nacen las ideas? No siempre las ideas vienen repentinamente como por arte de magia y normalmente tardan años en desarrollarse. Un claro ejemplo es el inventor de la Web: Tim Berners-Lee que comenzó con un proyecto que no acabó de salir bien, sobre cómo organizar sus propios datos. Sólo al cabo de diez años, Berners-Lee pudo conseguir una idea global y completa para que la web pudiera existir. Muchas veces, las ideas permanecen en ese estado de corazonada utópica que no somos capaces de hacer tangible porque ni siquiera nosotros entendemos a la perfección que queremos decir. La mayoría de las veces, hace falta otra corazonada para poder pasar de lo utópico a lo tangible. A lo largo de la historia, salas de reuniones informales como los cafés en el siglo de las luces, o los salones literarios en el modernismo, fueron una fuente enorme de ideas que surgían con la colisión de corazonadas. Por esta razón, ahora en la actualidad se usan equipos de trabajo en el proceso de conceptualizar ideas, ya que queda probado que cuando se dispone de un buen equipo en el cual reina la cooperación, la confianza, el entendimiento y la comunicación entre miembros, se puede llegar a obtener una suma mayor de ideas.
Hoy en día, la innovación y la creación constante de nuevas ideas es fundamental para la supervivencia de las empresas dentro del mercado. Es sabido que las empresas que no se actualizan y no van al día ni de acuerdo con las nuevas tecnologías, las noticias, los aspectos sociales, las preocupaciones de la sociedad, las nuevas leyes, los nuevos «trends»… acaban muriendo por el camino. Podemos afirmar entonces, que la empresa que no vaya cogida de la mano de la sociedad en su proceso de madurar y de ir creciendo, acabará obsoleta ya que no quedará lugar para ella en un mundo que no hace más que avanzar.
En conclusión, la aportación de nuevas ideas y soluciones en el mercado por parte de una empresa es fundamental para poder seguir jugando en él. Así pues, la innovación y la creatividad serán dos herramientas básicas para participar. Cómo hemos visto, el surgimiento de nuevas ideas no viene por arte de magia y la colaboración con más de una persona ayuda a que el proceso sea más rápido. Así que, el hecho de disponer de un buen equipo de trabajo hará que la supervivencia de la empresa esté en mejores manos.
En Innovation Factory™ Institute entendemos la importancia de la innovación y de la creatividad, y los hemos relacionado creando cursos de innovación y creatividad adecuados a las necesidades actuales de las empresas, dotándolos de las herramientas que luego los profesionales podrán utilizar en sus puestos de trabajo y desde cualquier área de la organización para ser más creativos e innovadores. También lo acompañamos de creativity KIT, «the box to think outside the box», tu instrumento para fomentar la creatividad empresarial con las principales técnicas creativas para su aplicación práctica. El kit complementa algunos de los cursos de nuestro portfolio:
- Mismos problemas, nuevas soluciones
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- Creatividad y pensamiento lateral
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- Creatividad exploratoria
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- Selección de las mejores ideas
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Estos cursos te permitirán aprender acerca de las organizaciones, como afrontar y adaptarse a los cambios externos e internos y como formar a los empleados para desarrollar su pro-actividad hacia la innovación y la creatividad partiendo del contexto cultural. Este curso está adecuado a las necesidades actuales de las empresas y proporciona herramientas que luego los profesionales podrán utilizar en sus puestos de trabajo. ¡Te invitamos a darle un vistazo a nuestros cursos sobre innovación y creatividad!
Cabe destacar que el hecho de innovar a tomado cada vez más fuerza dentro de todos los ámbitos sociales, económicos y productivos, gran parte de esto se debe a que las personas se encuentran en constante reinvención y adaptación esto conlleva a que se presenten soluciones a problemáticas cada ves con mas frecuencia, esto gracias a las diversas ideas que surgen de aquellas personas que sienten la curiosidad del por que surgen estos problemas y que soluciones tienen. Pero estas ideas no siempre suelen surgir de manera espontánea, sino que en su mayoría son parte de procesos de pensamientos que pueden llegar a durar años, en solución a estos largos procesos de pensamiento se encuentran los grupos de pensadores, personas que se reúnen en distintos lugares ya sea tomando un café, en una reunión de amigos e incluso los salones de clases de alguna institución, son ejemplos de donde pueden surgir estos grupos, dichos grupos son parte del proceso del surgimiento de ideas y de innovación de los distintos ámbitos de la sociedad, pudiendo llegar a surgir ideas como la creación de nuevos productos, empresas, etc.