Durante años las compañías han innovado utilizando la perspectiva de la Close Innovation. Es decir, las empresas han trabajado en proyectos en los que la innovación es solamente desarrollada en el interior de sus departamentos y en ningún caso la información ha circulado o se ha transmitido fuera de las paredes de la empresa.
Sin embargo, recientemente se ha dado el caso en que algunas compañías han decidido apostar por una nueva forma de crear innovación: la Open Innovation. Esta nueva técnica desarrollada por Chesbrough et al. (2006) puede quedar definida como «El uso intencionado de las entradas y salidas de conocimiento para acelerar la innovación interna, y ampliar los mercados para el uso externo de la innovación, respectivamente». Esto sugiere que la Open Innovation consiste principalmente en dos actividades:
- Dotar a la compañía de conocimiento exterior.
- Y traer el propio conocimiento interno de la compañía al exterior.
Sin embargo, otro aspecto crucial para la correcta implementación de la técnica puede estar en la propia organización. Para poder transferir con éxito el conocimiento a través de las barreras de la empresa, es importante que esta brinde apoyo a sus empleados y explique la importancia de la Open Innovation para el conjunto de la organización.
Las empresas pueden decidir adaptar la Open Innovation o bien porque creen en el concepto o porque creen que es necesaria para mejorar el rendimiento de su organización.
En el primer caso, algunas empresas adoptan la Innovación Abierta porque creen en ella. Estas empresas creen en los modelos de negocio abiertos y en el valor añadido que se ha creado. Estas compañías han entendido cómo competir en un mercado globalizado, que ya utilizan los medios de comunicación el crowdsourcing o la social media para ponerse en contacto con sus clientes, proveedores y usuarios.
Por otro lado, están las empresas donde la adopción de la Open Innovation es una necesidad de negocio real, pues en la economía actual hay muchas organizaciones que tratan de aprovechar al máximo sus recursos y reducir sus costes. En este sentido, como la Innovación Abierta trata también de la internalización de las ideas externas y la innovación (que a menudo se percibe como la creación de ideas «outsourcing»), es posible reducir los costes de I + D. Estas empresas no están realmente interesadas en entrar en un diálogo con sus clientes o usuarios, si no en agregar mayor cantidad de información externa (ideas, innovaciones) como sea posible.
El paso de la Closed a la Open Innovation no es una tarea sencilla y requiere un tiempo que la organización se aclimate y se adapte al nuevo funcionamiento. Sin embargo, todos los esfuerzos para mejorar, incluso los modestos, son oportunidades para practicar habilidades y pensamientos innovadores. La aplicación de prácticas de innovación puede llevar al cambio a través del continuo progreso y creación de valor, de modo que lo que podría haber sido una pequeña mejora se convierte en una innovación incremental que genera una fuerte diferenciación competitiva.
Muy interesante concepto. Desde luego la única forma que tenemos los pequeños de competir con los grandes es mediante la unión. Sin lugar a dudas tenemos que comenzar a ejercitar esta y otras prácticas como el coworking o el networking y compartir el conocimiento para crecer juntos.
¡Saludos!