La Open Innovation, ¿cómo se pone en práctica?

Hoy en día, el término Open Innovation o Innovación Abierta está sustituyendo al antiguo paradigma denominado Innovación Cerrada. Conocido en todo el mundo por su trabajo pionero en innovación abierta, el profesor de ESADE Henry W. Chesbrough fue quien acuñó el término en 2003.

La Open Innovation consiste en una nueva estrategia de innovación bajo la cual las empresas salen de su zona de confort y se abren al mundo. Se caracteriza por la colaboración con profesionales externos y la combinación de los conocimientos internos y externos para llevar a cabo proyectos de I+D+i. La Open Innovation ha revolucionado la manera en la que las organizaciones hacen frente a la innovación.  Actualmente, muchas empresas están abriéndose al mercado y a entender que ya no pueden mantener en secreto sus innovaciones, sino que más bien han de compartirlos.

Ahora bien, la teoría es muy bonita pero hay que llevarla a la práctica para que tenga utilidad dentro de las organizaciones. Algunas de las actuaciones a poner en práctica son las siguientes:

• Aprovechar el mercado: los componentes del mercado tales como los proveedores, los clientes y los competidores, pueden dar lugar a innovaciones dado que generan un flujo continuo e intenso de opiniones.
• Acércate al mundo de la investigación: a través de la colaboración con universidades, institutos y centros tecnológicos, se puede adoptar tecnología puntera.
• Adopta estándares y regulaciones: los estándares de seguridad y de calidad significan una importante fuente de innovación ya que las organizaciones se ven obligadas a incorporar innovaciones de proceso ante dichas nuevas regulaciones.
• Explota la propiedad intelectual: la adquisición de propiedad intelectual permite reducir considerablemente el denominado time-to-market.
• Cultiva las personas: mediante la creación de un clima y cultura innovadores se puede observar el entorno e identificar innovaciones u oportunidades de negocio.
• Muévete, habla y escucha: a través de eventos tales como exhibiciones, conferencias o ferias tecnológicas.
• Colabora: una colaboración tiene éxito sólo si se tiene una mente y visión abierta hacia dicha colaboración.

Finalmente, y a modo de conclusión, la Open Innovation no es algo que cualquier empresa puede hacer, sino que es vital que la organización tenga constancia, seriedad y una mentalidad abierta hacia el mercado. Aunque esto no es una tarea fácil, las numerosas ventajas  que provee la Open Innovation definitivamente hacen que merezca la pena pensárselo dos veces o más.

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